Buscad a Jehova mientras puede ser hallado llamadle en tanto que esta cercano.... Isaias 55:6



Venid a mi todos los que estàn trabajados y cargados , y yo os harè descansar... Mateo 11:28

miércoles, 11 de mayo de 2011

Marco de referencia

No recuerdo dónde la habré escuchado, pero sé que anoté esta frase para escribir sobre ella: “El éxito de uno se mide por el fracaso de los demás” (creo que es una variante de la dicha por el filósofo austríaco Iván Illich). Después de analizarla, me doy cuenta lo real de la misma, no por su concepto sino por su uso. Si analizas bien, ¿cuál es, usualmente, el marco de referencia para medir nuestro éxito? Generalmente lo evaluamos en base a, si iguales que nosotros, han alcanzado igual o más que nosotros. ¡Qué gran logro! Si a todos les va mal, y a nosotros no, ¡somos exitosos!



Sí, entendiste bien, es sarcasmo; sin embargo, lamentablemente real para muchos. Muchos vivimos comparándonos con los demás, y llegamos a sentirnos “conformes” si nuestro marco de referencia no alcanza lo que nosotros hemos alcanzado, no por nuestro real potencial. Se oirá fuerte, pero a eso se le llama mediocridad e inconformidad. Mediocridad porque, en ocasiones y sabichosamente, buscamos pares mediocres para “inflar” nuestro logro; inconformidad porque, al comparamos con “exitosos reales”, vemos lo que ellos alcanzaron y nos sentimos mal, no lo contextualizamos bajo lo que realmente podemos lograr.



Si tu marco de referencia para categorizarte “exitos@” o no es carrera, vehículo, vivienda, cuenta bancaria, belleza física, viajes logrados, etc., entonces es probable que vivas mediocre e inconformemente toda la vida; sin embargo, si es la humildad, paciencia, bondad, misericordia, perdón, y otros dones de la misma “especie”, entonces vas por buen camino. El primer grupo (cosas materiales) queda y es efímero; el segundo grupo nos lleva necesariamente a compararnos con Jesús, por lo que siempre tendremos un marco de referencia bien alto qué alcanzar, y nos debemos sentir gozosos por el simple hecho de intentarlo.



Efesios 4:13

hasta que todos lleguemos a la unidad de la fe y del conocimiento del Hijo de Dios, a un varón perfecto, a la medida de la estatura de la plenitud de Cristo



Autor: David A. Guerrero S.